Capítulo
5
-No tienes frio, ¿Janina
pero me llaman Jane? –Kod y Lewis se fueron hace un rato y los
demás se han ido dispersando por la playa pero yo quería quedarme
sola. Hacía mucho tiempo que no miraba el mar tranquila. Aun me
acuerdo cuando mi padre me llevaba a la playa, antes del divorcio,
alquilábamos una barca y pasábamos las tardes en medio del mar sin
hacer nada. El hombre atento y cariñoso que hacía esas cosas está
muerto y enterrado bajo el mar. Ahora en la superficie solo queda un
hombre borracho y agresivo que solo le importa una cosa aparte de sí
mismo, el dinero. Me estremezco al pensarlo. Ni siquiera respondo a
Clive que se sienta pegado a mí.
-Es bonito, ¿eh? –Asiento
con la cabeza. Tiene su cuerpo demasiado pegado al mío. Aunque lo
agradezco ya que me estoy muriendo de frio me pone nerviosa –Yo
solía venir a esta playa siempre con mis padres.
Le miro confusa -¿Solías?
-Al no es mi hermano
biológico. Pensé que ya lo sabías. –Abro los ojos como platos.
-De pequeño mi padre y mi madre me traían aquí. Me encantaba jugar
con la arena.
-¿Y qué les pasó a tus
padres? –Tengo la mirada clavada en él. No tiene ningún parecido
a Al. Al tiene esos ojos azules perfectos de una noche de verano en
la que solo se ven las estrellas en el cielo pero Clive es como un
día de tormenta. Sus ojos negros absorben todo lo que hay alrededor.
Me recuerdan a un pozo sin fondo.
-Mi madre murió enferma y
mi padre se suicidó –No sé cómo pero estoy abrazada a Clive y
llorando. Hace apenas unos minutos pensaba en la muerte de mi padre,
el hombre que yo conocía por lo menos lo está, pero una punzada me
corta el pecho al sentir la culpabilidad de que Clive no tiene a sus
padres y yo, me quejo del mío.
-Lo siento mucho –Digo
entre sollozos. Esto es ridículo, ¿por qué estoy llorando? Debería
estar consolando a Clive y no al contrario.
-No pasa nada, hace
ya mucho de ello. -Coge delicadamente mi barbilla. Nuestras miradas
se cruzan y gira la cabeza para besarme. Grrrr.
No me lo puedo creer, ¿estaba a punto de besar a Clive? Si no llegan
a sonarme las tripas de esa manera tan horrorosa mi boca estaría en
su boca, compartiendo su saliva. Me acuerdo de la noche anterior en
la que le conocí y a Al. ¿De verdad iba a besar al capullo del bar?
Al que debería estar besando es a Al, el que no tengo ni idea de
dónde se ha metido. Me imaginaba que esta noche Al me llevaría a un
botellón o a donde fuese y me liaría con él. No he hablado con el
exactamente del tema pero en Madrid si los tíos son majos quieren
lío. No lo sé por experiencia personal pero mis antiguas amigas me
lo contaban todo. Por supuesto yo estaba demasiada ocupada para
fijarme en chicos y además, los chicos no se fijan nunca en la amiga
deprimida. Ahora que lo pienso, menuda tontería, ¿por qué querría
alguien como Al liarse conmigo? Hay veces que vemos lo que nos da la
gana ver y es lo que me ha pasado ahora mismo con Al. Nadie como Al
sé liaría conmigo nunca. Pero, ¿por qué pienso en Al ahora? Dios,
que lioso es todo. El chico que tengo al lado es Clive no Al.
Centrate en Clive me
digo –Jane, ¿hace cuánto que no comes?
-Esta tarde en la
merienda, ¿por? –Miento
-Hola, felino, sal del
estómago de Jane –Dice mirando mi vientre y riéndose. Le acompaño
y finjo también una sonrisa.
-Idiota –Le pego un
pequeño puñetazo en el brazo. Odio mi cuerpo. ¿No podría quedarse
callado mi estómago? Por mucho ruido que haga no lo voy a hacer caso
así que podría mantenerse en silencio.
-Pero tienes suerte. Este
idiota prepara la mejor pizza del mundo. –Sonríe y no puedo evitar
fijarme en el blanco de sus dientes. Esa sonrisa perfecta acompañada
de los mechones de pelo negro que le caen desenfados e irregulares en
la frente a cada segundo me atraen más y más –Vamos, ¿a qué
nunca has cocinado en un restaurante? –Me da la mano para que me
levante de la arena y nos dirigimos a su coche.
-¿Y tu hermano?
–Pregunto. Intento sacarlo de mi cabeza pero Al aparece
constantemente con sus hipnotizantes ojos en mi cabeza.
-Con Bella
-¿Y Bella es? –Pregunto
-Su novia –Intento
ocultar mi decepción. ¡Pues claro que
tiene novia imbécil! Es encantador y está buenísimo.
Empiezo a roer mis uñas descaradamente y enfadada por la respuesta
que me ha dado el polo opuesto de Al.
Jooo, que pena que teng novia. A esa z***** hay que cargarsela, quiza tenga un accidente por las escaleras, muajajajaja. Vale, ya dejo de delirar jajajaja, quiero maaas!!!
ResponderEliminar